Texto © Pierluigi Angeli
Traducción en español de Susana Franke
Familia: Tuberaceae Dumortier (1822)
Género: Tuber Micheli ex Wiggers : E.M. Fries (1780)
Tuber magnatum Pico, 1788
El nombre deriva del vocablo latino “Magnates, -atum” = de los grandes, de los señores.
La familia de las Tuberaceae está compuesta por ascocarpos de tipo cleistotecio, o sea con la parte fértil cubierta. La carne está compuesta de estructuras fértiles y estructuras estériles que crean venas tenues dispuestas en modo irregular.
Descripción del género
El género más importante atribuido a esta familia es el género Tuber.
A este género son atribuidos ascocarpos hipogeos, de aspecto tuberiformes o subglobosos y, según la especie, ± grandes. Privados de hifas miceliares como penachos, algunas especies presentan una excavación en la base. El estrato externo (peridio), es liso, finamente granuloso o verrugoso con verrugas piramidales muy pronunciadas. La gleba está compuesta por la parte fértil que produce las ascosporas, que en su maduración asumirá el color típico de la especie, el olor, la consistencia, las venas tenues que hacen la carne marmolada, y que revisten particular importancia en la determinación de la especie.
La parte fértil está compuesta por ascos dispuestos desordenadamente, desde piriformes con forma de sacos o subglobosos y contienen generalmente de 1 a 5 esporas, a veces también 8. Las esporas son la mayoría de las veces elipsoidales, primeramente lisas luego ornamentadas por un retículo con mallas ± altas que forman alveolos o por acúleos ± largos y espinosos, en un comienzo amarillo amarronado y finalmente marrón negruzco.
Descripción de la especie
Ascocarpo: tuberiforme, de 0,5 a 10-15 cm y también mas, lobado, irregular, con gibosidades y cavidades de variadas dimensiones; superficie amarillenta, ocre pálido, con matices verduzcos, finamente granulado al observarlo con la lente.
Gleba: inicialmente blancuzca, luego amarillenta, ocre claro, luego marrón rojiza o marrón ocre, dura y compacta cuando joven, esponjosa en el hongo maduro; recorrida por venas estériles, suaves, blanquecinas, inmutables, dispuestas desordenadamente: los ascos de subglobosos a ovoidales, sésiles o con corto pedúnculo, contienen de 1 a 4 esporas. Olor fuerte, intenso, característico, de gas metano o queso fermentado, sabor agradable. Esporas: subglobosas, alveoladas, reticuladas, 25-34,5 × 21,5-30 µm.
Ascos: generalmente globosos, pedunculados o subpedunculados, 70 × 40-60 µm.
Hábitat: crece enterrado profundamente en el terreno debajo de algunas latifolias, especialmente robles, avellanos, álamos, etc. desde la llanura a la media colina, en otoño y al inicio del invierno.
Coemestibilidad: optimo comestible, muy buscado.
Observaciones. Es sin dudas la trufa más famosa, considerado el rey de las trufas.
Se reconoce fácilmente por el olor intenso, la superficie finamente granulada y amarillenta, por las esporas con retículo de mallas anchas, por el color de la gleba más claro respecto a las especies similares.
Il Tuber borchii Vittadini, con el cual se podría confundir, es más pequeño, de forma más regular y de color más rojizo, y presenta algunas diferencias microscópicas entre ellas el retículo de las esporas que se presenta en mallas densas.