Familia : Tachyglossidae
Texto © Dr. en Ciencias Giuliano Russini – Biólogo Zoólogo
Traducción en español de Juan Carlos Casalone
Similar a un erizo, el Tachyglossus aculeatus es un mamífero primitivo © Giuseppe Mazza
A estos dos géneros corresponden pocas especies. El género Tachyglossus tiene sólo dos: El Equidna puercoespín o Equidna trompa corta o Equidna erizo (Tachyglossus aculeatus) y el Equidna de Tasmania (Tachyglossus setosus).
El género Zaglossus reúne en cambio tres especies propias de Nueva Guinea, todas poco comunes y presentes solamente en la extremidad oriental y occidental de la isla. No han sido nunca encontradas en la parte central.
Si trata del Equidna de Barton (Zaglossus bartoni), del Echidna Brujin (Zaglossus bruijnii) y del Echidna bubu (Zaglossus bubuensis), todas conocidas, comunmente, como equidnas de trompa larga.
Una primera diferencia entre las especies de los dos géneros es, en efecto, la diferencia en la longitud de la trompa, llamado pico, que en las especies del género Tachyglossus es más corto, mientras que en las del género Zaglossus es mas fino y largo.
Además las especies del primer género están caracterizadas por la presencia mas o menos densa de púas largas, similares a los de los erizos, de donde proviene el nombre común de equidna erizo para el Tachyglossus aculeatus, mientras en las especies del género Zaglossus resultan más cortos y raros.
Las especies de ambos géneros son raras y al límite de la extinción según la IUCN. Además siendo su carne comestible, particularmente sabrosa según las opiniones de los indígenas.
Aún amamantando a los pequeños, pone los huevos; los machos tienen un espolón venenoso © G. Mazza
Los del género Zaglossus, inativas de Nueva Guinea, por un lado son menos afectadas por la civilización, por la urbanización y por la agricultura intensiva, respecto de Australia, por el otro lado son aún hoy un plato exquisito para las poblaciones tribales papuásicas que practican la caza intensamente.
Zoogeografia
Los equidnas erizos se encuentran en Australia, Tasmania e islas cercanas.
Ecología-Hábitat
Todos los equidnas, incluso el equidna erizo, son animales de tierra, Prefieren el terreno rocoso, a una cierta altitud, donde excavan sin parar el terreno en búsqueda de insectos.
Son particularmente atraídos por las hormigas, que capturan en gran número, tomándolas con la larga lengua pegajosa.
Logran dar vuelta también grandes piedras, con una fuerza insospechada e increíble, considerando el talle, y levantan la corteza de los árboles, para buscar, también allí, insectos y larvas escondidas.
Con los insectos, los equidnas comen también una cierta cantidad de arena y piedritas, útiles para la digestión, debido a la particular forma de su estómago.
En efecto, el saco gástrico de estos curiosos mamíferos está dotado de potentes paredes musculares, las cuales, funcionando en manera análoga al estómago posterior de muchas especies de pájaros, utilizan las piedritas comidas para destrozar el caparazón de los insectos.
Los huevos y los pequeños son protegidos en la bolsa ventral. En alto riesgo de extinción © G. Mazza
Morfofisiologia
Particular agujero común “cloaca” , donde fluyen sea el digestivo, que el sistema urogenital y por medio del cual se produce el acoplamiento, caso único en los mamíferos (en cambio común en los reptiles y pájaros), al punto de haber determinado el nombre del orden como Monotremata, hemos hablado ampliamente en la ficha introductiva del grupo.
Los caracteres generales, que se encuentran en las dos especies de equidna, nos dicen que se trata de animales con una trompa rígida, cilíndrica tubular y afilada, más corta en las del género Tachyglossus y más larga en los del género Zaglossus. Además, en las del primer género, la trompa termina dirigida hacia el alto, mientras que en los del segundo, hacia abajo.
La boca, situada en la punta de la trompa, es pequeña y circular.
No hay dientes implantados en las quijadas (y esta es una causa de una tan pobre presencia de restos fósiles de las especies en cuestión), pero el paladar y la porción posterior de la lengua, presentan puntas córneas, que sirven para triturar la comida cuando aun está en la boca. La lengua es subcilíndrica, larga y fina, similar a la de los hormigueros, por esta razón, algunos biólogos en el pasado, llamaban a estos animales hormigueros espinosos.
El cuerpo es fuerte, rodeado dorsalmente por una ruda piel en donde se encuentran numerosas púas rígidos, en el específico del Tachyglossus aculeatus, estos son numerosísimos y cubren todo el dorsal y los flancos del animal, son largos 20-25 cm, rígidos y de color amarillo, con punta negra.
Se nutre de insectos que encuentra en el suelo, debajo de los leños y dando vueltas piedras © Giuseppe Mazza
Sobre la cabeza y sobre el abdomen, en cambio, no hay púas, y también el pelo es más suave. El rabo, rudimental, es pequeñísimo, tanto que parece ausente a una primera mirada superficial.
Las patas son robustas, armadas de fuertes uñas curvas, en número variable de tres a cinco.
Estas son utilizadas para excavar buscando insectos, acá como para hacer agujeros donde estos animales solitarios usan para acostarse, o refugiarse para escapar de un ataque, protegiendo el vientre que es la parte mas vulnerable, dejando al externo el lomo con los peligrosos acúleos.
Las patas posteriores aparecen torcidas, pues los pies están directos hacia el externo, en los machos estos están provistos de un espolón córneo, situado en la parte anterior y puesto en comunicación con una glándula venenosa.
Un órgano análogo, pero con un veneno con acción mas intensa, está presente también en el más famoso representante de este orden arcaico, el Ornitorinco (Ornithorhynchus anatinus).
El origen evolutivo de este órgano, así como su función, sea para el Ornitorinco que para la Equidna, no se explica aun a los biólogos zoólogos, algunos autores han propuesto para el Ornitorinco, un uso dirigido al combate contra un similar, para la conquista de la hembra durante la temporada de los amores, pero para el Equidna este uso parece no presentarse. El color del Equidna erizo, y esto vale también para la otra especie, es oscuro, la piel es marrón-negra. Las dimensiones no son excesivas para todos los Equidnas ,van de 40 a 80 cm.
El Tachyglossus aculeatus es la especie más pequeña de ambos géneros, la longitud total no supera los 40 cm, de los cuales sólo uno, o máximo dos, corresponden al rabo.
Como muchos pájaros, engulle arena y piedrecillas para triturar la comida en el estómago © G. Mazza
Etología-Biología Reproductiva
Excepto el período de la reproducción que es entre Julio-Agosto, todas los Equidnas son animales predispuestos a la vida solitaria.
Se trata de mamíferos ovíparos, Los huevos con telociticos meroblasticos, o sea con una yema y una segmentación parcial, como los reptiles y los pájaros. Son de color blanco y de pequeñas dimensiones, con una cáscara suave, elástico-membranosa, que se parece al huevo cleidoico de los reptiles.
No vienen depositados en el terreno, sino que son custodiadas en un bolsillo abdominal, quedando pegados a la piel gracias a una sustancia pegajosa que las rodea desde el momento de la deposición.
Los pequeños nacidos, en número variable de uno a tres, en promedio dos, son muy inmaduros y se quedan en el bolsillo, parecido a un marsupio, por un cierto período de tiempo.
La ubicación de las mamas permite que vengan amamantados sin que tengan que salir del acogedor refugio.
Después de un cierto periodo, los Equidnas alcanzan un cierto tamaño y comienzan a desarrollar los acúleos, es en este punto que la madre los extrae del bolsillo abdominal, transfiriéndolos en un lugar reparado y apartado, lugar que controla activamente yendo regularmente para proseguir con el amamantamiento hasta que haga falta.