Familia : Anatidae
Texto © Dr. Davide Guadagnini
Traducción en español por el Prof. José Campos
El Tarro rajá (Radjah radjah) debe su nombre específico a su apariencia real. Es el más pequeño de su género con 800-900 g de peso. Arborícola, muy ruidoso y poco social en la época reproductora © Giuseppe Mazza
El Tarro Rajá o Radjah (Radjah radjah Lesson 1828), previamente conocido como Tadorna radjah, es el más pequeño de las seis especies existentes de tarros, un grupo de anátidas con una forma bastante característica y un tamaño medio que incluye a los tarros blancos y canelos.
Pertenece al orden Anseriformes, a la familia de las anátidas (Anatidae) y a la tribu Tadornini.
Hay dos subespecies: la nominal (Radjah radjah radjah), presente en las islas Molucas y Nueva Guinea, con el manto y la banda pectoral de tono más negruzco que en la subespecie presente en Australia (Radjah radjah rufitergum), que es ligeramente mayor que la nominal y con la parte dorsal mayormente de color castaño.
El nombre genérico Tadorna, donde se incluía anteriormente esta especie, deriva del latín y significa «ave acuática pía» y se refiere claramente a los colores bien separados y nítidos presentes en la librea de algunas de las especies de este género.
El nombre específico radjah es el término hindú para soberano o rey; se denominó así a esta especie para indicar su aspecto real.
Zoogeografía
La subespecie nominal vive en las costas de las islas Molucas y de Nueva Guinea. La subespecie australiana (Radjah radjah rufitergum) está confinada a las costas tropicales del norte de Australia, donde su área de distribución se ha reducido considerablemente durante el pasado siglo.
Ecología-Hábitat
Estos patos viven en los humedales y estuarios de las regiones monzónicas. Tienen hábitos costeros durante la estación seca, cuando frecuentan zonas fangosas, manglares, ríos y lagunas salobres a menudo adyacentes a playas y saladares. Prefieren áreas con aguas muy someras (unos pocos centímetros) con presencia de «piscinas» naturales y bancos de fango o márgenes de humedales con agua más profunda.
Morfofisiología
De los tarros existentes actualmente, es el más pequeño, con una longitud de 48-60 cm y un peso de 800-950 g. Tiene una librea y un porte muy elegantes y es el más especializado y el más tropical de su grupo. La cabeza, el cuello, los flancos y el vientre son de color blanco. El manto y la cola son oscuros, de color marrón negruzco o marrón castaño oscuro. Las alas tienen un espejuelo irisado de color verde oscuro que resalta en la zona blanca donde se encuentra; por encima del espejuelo alar hay una delgada línea paralela a este de color negro; el tercio distal del ala (primarias, coberteras primarias y álulas) es de color negro. Por debajo, el ala es blanca en su parte central y negra en la distal. El pecho está atravesado por un característico «collar bajo», oscuro como el manto. Los sexos son similares, con machos ligeramente más grandes y con la banda pectoral un poco más ancha. Los ojos son bastante particulares, por el iris blanco. El pico y las patas son de color rosa carne pálido con tonos grises claros.
Etología-Biología reproductiva
A pesar de ser menos ruidosos que otras especies de tarros, estos patos se vuelven de todas formas bastante ruidosos durante la época reproductora. Los tarros rajá son hábiles voladores a los que les gusta atravesar las zonas boscosas en lugar de sobrevolarlas. Vocalizan continuamente, especialmente cuando vuelan, tanto que a menudo se oyen antes de ser vistos. Los reclamos, diferentes en machos y hembras, permiten distinguir el sexo: los de las hembras, duros y fuertes, contrastan con los silbidos de los machos. Esta especie es bastante arborícola y durante el día se posa en orillas con vegetación o en árboles frondosos (como manglares o Melaleuca spp.) a los que sube (o baja) fácilmente andando por las ramas. También utiliza las orillas fangosas para descansar; rara vez se alejan del agua, y pueden correr de modo sorprendentemente rápido.
Tiene principalmente hábitos alimenticios nocturnos; en general, los tarros abandonan sus posaderos al final de la tarde para ir a alimentarse a unos pocos kilómetros de distancia. Poco antes de partir a los lugares de alimentación, los tarros rajá se vuelven muy activos, reuniéndose en pequeños grupos en las partes superiores de la vegetación. Su dieta es principalmente carnívora, alimentándose principalmente de pequeños moluscos, aunque también incluye insectos, algunas plantas y algas. La técnica de alimentación consiste en tamizar el fango con el pico que mueven de un lado a otro, mientras caminan rápidamente en las aguas someras. También pueden pastar en el suelo.
En su área de distribución, en las Molucas, Nueva Guinea y Australia, frecuenta manglares y estuarios. Prefiere las aguas someras y tiene una dieta principalmente carnívora. Todavía frecuente, está legalmente protegido pero amenazado por la actividad humana. Esta especie tiene hábitos monógamos que pueden durar toda la vida © Giuseppe Mazza
Durante la época reproductora, el tarro rajá se reúne en parejas o en pequeños grupos de 6-8 individuos. Durante la estación seca, se pueden observar grupos mucho más grandes, de algunas docenas a varios cientos de individuos, que se congregan en zonas húmedas apropiadas. Estos bandos se dispersan al comienzo de la temporada de lluvias (o justo antes), coincidiendo con el periodo reproductor.
En Australia, esta especie se reproduce generalmente de abril a junio; sin embargo, los tiempos y la duración de la temporada reproductora están condicionados por la cantidad e intensidad de las lluvias, de manera que, si la temporada de lluvias se prolonga, la época reproductora también lo hará.
Esta especie tiene hábitos monógamos que pueden durar toda la vida. El tarro rajá no es muy tolerante con sus propios congéneres; los machos se vuelven particularmente agresivos a medida que se acerca la época reproductora.
La pareja reproductora defiende valerosamente su territorio y persigue a los intrusos con el plumaje erecto, cuellos estirados hacia adelante y vocalizaciones amenazantes. El territorio de nidificación defendido (a nivel del frente acuático) puede ser incluso de 3 km de largo o un poco más, incluido el sitio de anidación y el área de alimentación y generalmente da a los ríos o lugares húmedos que incluyen áreas adecuadas para la cría de los pollos.
Los nidos se encuentran cerca del agua, a menudo en oquedades de troncos, en la base de grandes ramas o en ramas rotas que ofrezcan una superficie de soporte suficiente. Las cavidades óptimas son ocupadas por la misma pareja en los años siguientes. La puesta consiste generalmente de 6-12 huevos de color crema, incubados por la hembra durante aproximadamente 28-30 días. Los patitos son de color marrón con la parte superior de la cabeza más rojiza y con manchas de color blanco amarillento a nivel de las alas, los flancos y el dorso; de este color son también las mejillas, el cuello, el pecho y el vientre. Los dos progenitores cuidan a los pollos que permanecen en lugares con agua hasta que alcanzan la edad de volar. Las nidadas pueden unirse para formar super-nidadas más numerosas; los jóvenes pueden volar aproximadamente a los dos meses de edad, pero los núcleos familiares permanecen generalmente unidos durante toda la estación seca siguiente. Esta especie resulta fácil de cazar debido a su propia naturaleza confiada junto con un vuelo bastante lento.
Aunque este pato está protegido (con penas que, en ciertas áreas, pueden acarrear multas severas) y a pesar de que su carne no es particularmente buena, muchos ejemplares son abatidos simplemente por ser blancos fáciles. A pesar del hecho de que ambas subespecies son bastante abundantes, la subespecie australiana en particular se considera bastante rara o ausente en ambientes considerados idóneos para esta especie debido a la caza furtiva con armas de fuego.
La trágica pérdida de hábitats en las zonas húmedas costeras tropicales, el aumento de los asentamientos humanos, la construcción de carreteras y el aumento de la actividad agrícola y humana en general también son elementos de gran preocupación para la supervivencia de esta y otras especies. La expansión del cultivo del arroz en los territorios monzónicos del norte, baluarte para la especie, podría representar una seria amenaza en un futuro cercano. Por el contrario, la creación de canales de riego y lagos artificiales ha beneficiado a la especie. El tarro rajá es apreciado por los criadores de todo el mundo, aunque la subespecie rufitergum generalmente no está presente en colecciones fuera de Australia.
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