Parietaria officinalis

Familia : Urticaceae

Texto © Eugenio Zanotti

 

Traducción en español por el Prof. José Campos

 

El área de distribución original de la Parietaria (Parietaria officinalis L. 1753), también llamada hierba del muro o hierba vitriólica (en Italia), se extiende desde la Europa templada hasta Ucrania. El nombre genérico, al que se abscriben según varios autores de 20 a 30 especies, deriva del latín «paries», pared, muro, por el hábitat característico de la mayoría de sus especies; officinalis deriva del sustantivo latino «officina», usado para la mayoría de las plantas con propiedades medicinales utilizadas en las «oficinas», que era como se llamaban las farmacias en el pasado.

Planta herbácea perenne, provista de largos rizomas, cubierta de diminutos pelos curvos que la hacen adherirse a la ropa, con tallos cilíndricos erectos, de 20-70 (100) cm de altura, poco ramificados, generalmente rojizos, suculentos, poco tenaces, con hojas alternas, enteras, largamente pecioladas, ovado-elípticas o lanceoladas, acuminadas (2-4 x 5-10 cm), con nervadura translúcida.

Flores en cimas geminadas, blanco-verdosas, sésiles, glomerulares, multifloras. Las flores hermafroditas, con tres brácteas, aparecen en el ápice de las ramitas, mientras que las flores masculinas y femeninas, equipadas con una sola bráctea, se encuentran en las bifurcaciones de las ramas. Las brácteas son ovadas u oblongas, libres en su base. La floración ocurre de mayo a octubre. Los frutos son pequeños aquenios de 1-2 mm con forma de aceituna, comprimidos, cubiertos por el perianto persistente.

Es una especie muy común tanto en ambientes naturales (suelos forestales ricos en nutrientes, terrenos abandonados) como invasora en lugares cultivados y habitados (bordes de canales, terrenos incultos y ricos en nitratos, al pie de paredes, en jardines, setos, patios, etc., desde la llanura hasta 900 m de altitud). La parietaria se propaga por semilla, confiando su dispersión, principalmente zoócora, a la capacidad de la planta de adherirse al pelaje de los animales y la ropa, a la maquinaria, de modo que incluso un trozo pequeño de tallo transportado lleva las semillas durante su viaje. Quienes cuidan las zonas verdes cortando la parietaria o quitándola de las paredes no piensan que ellos mismos la están propagando…

Es más, la capacidad de esta especie de rebrotar de sus tallos, muy frágiles y fáciles de arrancar, es impresionante, dada la considerable cantidad de yemas que hay en los rizomas y en la base de la planta, listas para emitir siempre nuevos brotes vigorosos.

Una especie muy similar es Parietaria judaica L. (= P. diffusa M. & K.; P. ramiflora Moench.), que a menudo se encuentra en paredes viejas, roquedos, escombros, y es distinguible porque tiene tallos muy ramificados, a menudo más o menos lignificados en la parte inferior y con un hábito compacto, postrado-ascendente, hojas ovaladas de hasta 5 cm de largo con nervios no transparentes como los de P. officinalis, brácteas florales soldadas en la base (en P. officinalis las brácteas son libres). La planta florece todo el año y el polen es transportado por el viento (polinización anemófila); en la fructificación, el perianto que rodea al aquenio es casi el doble de largo que éste, mientras que en P. officinalis lo supera ligeramente. En Europa se encuentran, además de las dos especies ya mencionadas, Parietaria lusitanica, P. cretica, P. mauritanica, P. debilis y la exótica P. pensylvanica de origen norteamericano, naturalizada en Alemania y probablemente en otros lugares.

Hace tiempo, las niñas, especialmente en el campo, se divertían haciendo collares con hojas de parietaria que se adherían a las camisetas, mientras sus madres introducían las plantas troceadas en las botellas y en las damajuanas con agua y arena como abrasivo para limpiarlas de las incrustaciones de tártaro y del vino, de ahí el nombre italiano de «hierba vitriólica». Los muchachos que jugaban en el campo y pescaban en los canales sabían que si entraban en contacto con las ortigas podían encontrar alivio machacando hojas y tallos de parietaria y aplicando la pulpa obtenida en las ronchas causadas por los molestos pelos urticantes.

Para fines medicinales (propiedades diuréticas, depurativas, cicatrizantes, constipativo-astringentes, antihemorrágicas y como antídoto), se recolecta la planta durante el período de floración, sin las raíces y la parte inferior de los tallos. Contiene principalmente nitrato potásico (salitre) y cálcico, azufre, mucílago, taninos, flavonoides y un heterósido, y se usa, por medio de infusión o decocción, como diurético. En medicina popular, se recomiendan cataplasmas de plantas frescas trituradas para tratar la dermatitis crónica. Hay que recordar que el polen de la parietaria se encuentra entre los que causan fuertes alergias en muchas personas («fiebre del heno») y éstas deben abstenerse de recolectar y manipular la planta o frecuentar las zonas donde es abundante y está en flor. Indico a continuación dos preparaciones simples hechas con parietaria fresca:

Infusión útil para catarro bronquial, hidropesía, cálculos renales y vesicales

Dos cucharaditas de plantas trituradas en una taza de agua hirviendo, durante un cuarto de hora; filtrar, añadir un poco de limón y miel y tomar después de las comidas.

Pasta dulce diurética

Media cucharadita de planta triturada en dos cucharadas de miel. Consumir fraccionando en cuatro o cinco dosis a lo largo del día.

Sinónimos: Parietaria erecta Mert. & W.D.J. Koch (1823).

 

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