Familia : Orchidaceae
Texto © Prof. Pietro Pavone
Traducción en español por el Prof. José Campos
Oncidium vulcanicum es una litofita o epífita cespitosa, nativa de Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú, entre 1800 y 3000 m de altitud © Giuseppe Mazza
Oncidium vulcanicum (Rchb.f.) M.W.Chase & N.H.Williams es una especie de la familia Orchidaceae, subfamilia Epidendroideae, tribu Cymbidieae, subtribu Oncidiinae.
Es nativa de Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú y se encuentra a altitudes entre 1800 y 3000 metros, en las paredes rocosas de las gargantas o, como epífita, en la selva húmeda, creciendo sobre ramas. Se encontró por primera vez en 1872 en Ecuador, a una altitud de 3050-3350 m, en las laderas del volcán Tungurahua (5023 m), uno de los volcanes más activos de este país.
Es una planta que puede alcanzar 15-20 cm de altura, con vistosas flores polinizadas por colibríes © Giuseppe Mazza
Su nombre, en lengua quechua, significa «garganta ardiente» o «garganta de fuego».
También se ha encontrado a altitudes más bajas, en Baños de Agua Santa a 1800 m de altitud, en la provincia de Napo a 2050 m y en la provincia de Pichincha a 2000-2500 m de altitud.
En Perú crece en bosques muy húmedos de montaña, de 2100 a 2300 m de altitud, generalmente sobre ramas bien expuestas.
Esta especie fue descrita inicialmente en The Gardeners’ Chronicle & Agricultural Gazette 393 (1872) por Heinrich Gustav Reichenbach (1823-1889) con el nombre de Mesospinidium vulcanicum.
Otros autores la transfirieron posteriormente a los géneros Cochlioda y Odontoglossum, que ya no son válidos para esta especie en la actualidad.
Se ha incluido en el género Oncidium Sw. por M.W. Chase & N.H. Williams (Lindleyana 21-3: 27, 2008), basándose en pruebas moleculares.
Este género, descrito por primera vez en 1800 por Olof Peter Swartz (1760-1816), incluye más de 330 especies de orquídeas que se distribuyen actualmente por gran parte de Sudamérica, Centroamérica, México y las Antillas, alcanzando una notable diversidad morfológica en los Andes.
El nombre genérico deriva de la palabra griega ὀγκος, ‘onkos’ que significa ‘hinchazón’, debido a la presencia de una pequeña excrecencia carnosa en la base del labelo (callo).
El epíteto vulcanicum indica que la especie se encontró y vive en un entorno volcánico.
Los estudios de sistemática molecular han demostrado que este género no es monofilético: muchas de las especies que se le atribuyen basándose en los caracteres florales son, en cambio, filogenéticamente distantes ya que estos caracteres se adaptan en función de los polinizadores presentes.
La larga duración de las inflorescencias racemosas ha atraído la atención de los aficionados y han surgido numerosas formas hortícolas © Ron Parsons
Debido a la reducción de su hábitat, Oncidium vulcanicum, a partir del 22 de junio de 2021, se ha incluido para América Latina y el Caribe en el Apéndice II de la Convención de Washington (CITES), cuyo objetivo es proteger las especies animales y vegetales amenazadas de extinción impidiendo su comercio y, en particular, su exportación y posesión.
Oncidium vulcanicum es una litófita, pero también una epífita cespitosa, que puede alcanzar los 15-20 cm de altura con pseudobulbos ovoides, comprimidos lateralmente, de 1,5-2,0 cm de longitud, que llevan en el ápice una única hoja (10-15 x 1,5 cm) de color verde oscuro, ligeramente carnosa, con un corto pecíolo.
Pueden tener hasta 25-30 flores muy decorativas si se cultivan en cestas colgantes © Ron Parsons
La inflorescencia es racemosa, basal, con un largo pedúnculo (aprox. 30 cm), erecto o péndulo, con una hoja o vainas foliares desecadas en la base.
Presenta numerosas flores (25-30) en forma de estrella, que permanecen abiertas durante mucho tiempo.
Suelen ser rojas o anaranjadas, pero también las hay de color rosa, amarillo o rosa intenso, y miden unos 4 cm.
La floración comienza a finales de verano y puede prolongarse hasta la primavera siguiente.
La polinización es llevada a cabo por colibríes.
Oncidium vulcanicum es una especie muy ornamental y requiere temperaturas frescas para su cultivo.
En la naturaleza, la temperatura media diurna a lo largo del año es de 21-23 °C, y la nocturna de 11-13 °C, con una diferencia diaria de 9-11 °C.
La luz debe ser abundante (12000-25000 lux), pero nunca directa, y la humedad en torno al 80%.
Se puede cultivar en macetas con corteza de abeto de tamaño medio para un buen drenaje y para permitir la circulación del aire alrededor de las raíces.
En general, el sustrato debe sustituirse cada 2 años.
Para apreciar su bella floración, se puede colocar en una cesta colgante, produciendo sus inflorescencias rosas péndulas un fascinante efecto.
Durante el crecimiento, las plantas deben abonarse cada semana con 1/4-1/2 de la dosis recomendada de abono para orquídeas.
Es conveniente regarlas una vez a la semana y sólo cuando la tierra esté seca. La cantidad de riego puede reducirse ligeramente en invierno, especialmente cuando se cultivan en latitudes medias con días cortos y poca luz.
Durante el invierno, el abonado debe reducirse o eliminarse.
Oncidium vulcanicum ‘Yasnita’. En la naturaleza, la temperatura media anual diurna es de 21-23 °C, y la nocturna de 11-13 °C, con una diferencia diaria de 9-11 °C © Ron Parsons
Entre los cultivares galardonados en los últimos años se incluyen: Oncidium vulcanicum ‘Jasmin’ (2013); Oncidium vulcanicum ‘Klein Flottbek’ (2012); Cochlioda vulcanica ‘Eumelia’ (2005); Cochlioda vulcanica ‘Ganesh’ (2004); Cochlioda vulcanica ‘J & L’ (1973).
Sinónimos: Cochlioda vulcanica (Rchb.f.) Benth. & Hook.f. ex A.H. Kent (1893); Cochlioda vulcanica (Rchb.f.) Benth. & Hook.f. ex B.D. Jacks. (1893); Cochlioda vulcanica (Rchb.f.) Benth. & Hook.f. ex Rolfe (1886); Cochlioda vulcanica (Rchb.f.) Ridl. (1886); Cochlioda vulcanica var. splendens Froebel ex Cogn. (1898); Mesospinidium vulcanicum Rchb.f. (1872); Odontoglossum vulcanicum (Rchb.f.) Dalström (2012).
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