Familia : Callionymidae
Texto © Giuseppe Mazza
Traducción en español de Ignacio Barrionuevo
Maestro del mimetismo, el Pez mandarín marrón (Neosynchiropus ocellatus Pallas, 1770) pertenece a la clase Actinopterygii, los peces con las aletas radiadas, al orden Perciformes y a la familia Callionymidae, una familia de peces bentónicos que, evolutivamente hablando, es próxima a la familia de los Gobiidae.
Esta familia cuenta con una veintena de géneros y casi 200 especies comúnmente llamadas peces mandarín o dragoncillos, por su extraño aspecto, sin escamas.
Bajo la piel, en el preopérculo, muestran a ambos lados una gruesa espina afilada que provoca heridas dolorosas, de lenta cicatrización, de donde le viene el nombre común que se le da en algunos idiomas de “pez araña”.
El nombre genérico Neosynchiropus viene del griego “νέο” (neos) = nuevo, «συν» (syn) = con, “” (cheir) = mano y «χείρ» (pus) = pies, para decirnos que, como ocurre para el género afín, Synchiropus, de más antigua descripción, las aletas son usadas “a modo de pies” para moverse entre las formaciones coralinas en el fondo del mar. El epíteto específico ocellatus, viene del latín “ocellus” = ojo, ocelo, en referencia a los dibujos en la primera y más grande aleta dorsal de los machos y a los numerosos ocelos miméticos de la librea.
Zoogeografía
El pez mandarín marrón presenta una amplia distribución en las aguas tropicales del Indopacífico. A título indicativo diremos que, partiendo desde Vietnam, Indonesia y Australia, lo encontramos hacia el nordeste en las Filipinas, Taiwán, las islas Ryukyu y Japón, y al sudeste en las islas Palaos, Papúa Nueva Guinea, Micronesia, islas Wake, Marshall, Salomón, Fiyi, Nueva Caledonia, archipiélagos de Tonga, Samoa, Polinesia Francesa, islas Marquesas y las Pitcairn.
Ecología-HábitatSe mueve sobre el fondo, junto a las paredes externas de las formaciones coralinas hasta alrededor de los 30 m de profundidad.
Morfofisiología
Rara vez supera los 8 cm de longitud, con un cuerpo alargado y cilindriforme. Los ojos están cercanos y son protuberantes sobre la cabeza que, vista desde lo alto, se revela triangular y puntiaguda, justo como la de un pequeño dragón. La boca es protráctil con varias filas de dientes minúsculos.
Presenta dos aletas dorsales y, como ocurre en el Synchiropus picturatus y el Synchiropus splendidus la primera, que presenta 4 radios espinosos, está más desarrollada en los machos. La segunda dorsal cuenta con entre 8 y 10 radios blandos. La aleta anal, con entre 7 y 9 radios, carece de espinas, al igual que las anchas pectorales, que presentan de 18 a 23 radios, y las ventrales sobre las que camina. La aleta caudal es redondeada.
Como es típico en la familia Callionymidae, bajo la piel de los preopérculos encontramos una gruesa espina marcada, a modo de advertencia, por una línea vertical azul, que sirve para la defensa y el combate entre machos. Las aberturas branquiales están reducidas a dos pequeños orificios en la parte superior de la cabeza. Carece de escamas, pero el cuerpo está protegido por una mucosidad, segregada en abundancia cuando el pez se siente amenazado o bajo estrés. Lo defiende además de los parásitos y tiene un olor ciertamente desagradable para los depredadores. Sobre el fondo marrón rojizo ambos sexos presentan un perfecto traje de camuflaje con manchas blancas, zonas oscuras y ocelos blancos bordeados de negro. No falta un punteado oscuro sobre las zonas claras y un barrado casi rojo en la aleta dorsal retomado también en la caudal para interrumpir la transparencia. Las amplias aletas pectorales presentan radios dorados.Etología-Biología Reproductiva
El pez mandarín marrón vive en pequeños grupos alimentándose de microorganismos bentónicos que encuentra sobre los fondos detríticos, las algas y los corales. Estos son principalmente ostrácodos y copépodos harpacticoides, pero también ingieren huevos de moluscos y peces o larvas nadadoras de diversas especies. Para el apareamiento los compañeros suben abrazados hacia la superficie, vientre con vientre, y tras la fecundación confían los huevos flotantes a las corrientes.
Se ha conseguido que se reproduzca en cautividad y se adapta bien a los grandes acuarios en los que con el tiempo, gracias a los corales o al agua recogida del mar, se hayan asentado poblaciones de crustáceos planctónicos. Se ha revelado también como un útil combatiente contra las plagas de planarias.La resiliencia de la especie es óptima: son suficientes 15 meses para reponer las pérdidas causadas por cualquier catástrofe. La presión ejercida por el mercado acuariológico es prácticamente nula y, ocurra lo que ocurra a su alrededor, el Neosynchiropus ocellatus siempre encontrará algo para comer. El índice de vulnerabilidad de esta especie es, por tanto, muy bajo: tan solo 13 en una escala de 100.
Sinónimos
Callionymus ocellatus Pallas, 1770; Synchiropus ocellatus Pallas, 1770; Callionymus punctulatus Lacepède, 1800; Callionymus microps Günther, 1877; Synchiropus lili Jordan & Seale, 1906; Synchiropus shoe Okada & Ikeda, 1937; Synchiropus rhodonotus Fowler, 1946.
→ Para informaciones generales sobre peces ver aquí.