Ficus variegata

Familia : Moraceae


Texto © Pietro Puccio

 

“ignacio.gif"
Traducción en español de Ignacio Barrionuevo

 

Ficus variegata es una especie del sudeste asiático que supera en la naturaleza los 30 m de altura © Giuseppe Mazza

Ficus variegata es una especie del sudeste asiático que supera en la naturaleza los 30 m de altura © Giuseppe Mazza

La especie es originaria de Australia (Queensland), China (Fujian, Guangdong, Guanxi, Hainan y Yunnan), Filipinas, Japón (islas Ryukyu), India, Indonesia (Java, Irian Jaya, Kalimantan, Molucas, Islas Menores de la Sonda, Sulawesi y Sumatra), islas Andamán, islas Nicobar, islas Salomón, Malasia, Myanmar, Papua Nueva Guinea, Singapur, Taiwán, Tailandia y Vietnam, países en los que habita las selvas húmedas a baja altitud.

El nombre del género es el que se utilizaba en latín para el higo común (Ficus carica); y el epíteto específico es el adjetivo latino “variegatus, a, um” = variegado, jaspeado, en referencia al color de los frutos.

Nombres comunes: common red-stem fig, green-fruit fig, variegated fig (inglés); za se rong (China); tangisang bayawak (Filipinas); giran-inu-biwa (Japón); gele, gondang, nyawai (Indonesia); kayu, pahobo (Sulawesi); phuuk (Tailandia); sung trổ, sung vè, vả rừng (Vietnam).

El Ficus variegata Blume (1825) es un árbol siempreverde o caducifolio durante un breve periodo, dioico, por lo general hasta alrededor de los 15 m de alto, aunque los viejos ejemplares en la naturaleza pueden superar los 30 m, con tronco erecto que puede superar el metro de diámetro dotado en su base de raíces tabulares (raíces aplanadas parecidas a contrafuertes) y corteza lisa de color gris amarronado. Por sus heridas exuda una abundante savia lechosa.

Las hojas, sobre un peciolo de entre 2 y 6,5 cm de largo, son alternas, simples, ovado-elípticas con margen entero, ondulado o ligeramente dentado, ápice obtuso o acuminado y nervadura prominente, coriáceas, de entre 10 y 25 cm de largo y de 5 a 15 cm de ancho, de color verde intenso en el haz, pálidas en el envés; estípulas (apéndices en la base de la hoja que tienen como función principal la de protegerla durante la fase inicial de desarrollo) caedizas, ovado-lanceoladas, glabras o ligeramente pubescentes, de entre 1 y 1,5 cm de largo.

Las inflorescencias son cavidades de paredes carnosas, denominadas siconos, que encierran por completo a las flores, y a las que puede accederse a través de una apertura apical cerrada por 3 minúsculas escamas. Los siconos, agrupados sobre cortas ramas tuberculadas, están sostenidos por un pedúnculo de entre 2 y 4 cm de largo,naciendo sobre el tronco y las ramas viejas carentes de hojas (caulifloría), son globosos, globoso-deprimidos o piriformes, de 2 a 3,5 cm de diámetro, de color rojo con franjas y manchas verde claras cuando están maduros, con flores masculinas y femeninas en individuos distintos; los diminutos frutos (aquenios) contienen una sola semilla. La polinización está efectuada por un insecto perteneciente a la familia Agaonidae, en este caso se trata de Ceratosolen appendiculatus Mayr, 1885. Como es famoso, a cada especie de Ficus está asociado un insecto específico que, a su vez, solo puede reproducirse en presencia de la especie a la que está asociado.

Los frutos, producidos abundantemente y durante todo el año, son una importante fuente de alimento para diversas aves y mamíferos selváticos, entre los que se cuentan algunos primates, que contribuyen a la dispersión de las semillas.

Se propaga por semillas, que han de colocarse sobre sustrato orgánico, arenoso, mantenido constantemente húmedo y a una temperatura de entre 24 y 26 ºC; se reproduce también por esquejes apicales en primavera y por acodo aéreo a comienzos de verano.

Los siconos, agrupados sobre cortos pedúnculos de 2-4 cm, nacen sobre el tronco. La fructificación, generosa y casi continua, es una importante fuente de comida para los animales selváticos que contribuyen a su dispersión. Los frutos secos son a veces tomados con arroz por los locales. Hojas y corteza muestran virtudes terapéuticas © Giuseppe Mazza

Los siconos, agrupados sobre cortos pedúnculos de 2-4 cm, nacen sobre el tronco. La fructificación, generosa y casi continua, es una importante fuente de comida para los animales selváticos que contribuyen a su dispersión. Los frutos secos son a veces tomados con arroz por los locales. Hojas y corteza muestran virtudes terapéuticas © Giuseppe Mazza

Especie distribuida por una amplia área del sudeste asiático, desde la India hasta las islas del Pacífico, pero poco conocida fuera de sus zonas de origen, presente casi exclusivamente en jardines y colecciones botánicas donde representa uno de los puntos de atracción por su tronco y sus ramas carentes de hojas a menudo cubiertos casi por completo de frutos, que merecería una mayor difusión como ornamental en los parques y jardines de las zonas con clima tropical y subtropical húmedo. De rápido crecimiento, requiere pleno sol o una ligera sombra y no es particularmente exigente en relación al suelo más que drene bien y sea mantenido casi constantemente húmedo. En su colocación debe tenerse en cuenta el aparato radical superficial y a menudo invasivo, debiendo ponerse suficientemente lejos de edificios, carreteras y aceras. La madera, ligera y blanquecina, es usada para revestimientos internos, cajas, objetos de artesanía y en la elaboración de contrachapado, además de cómo combustible. Los frutos desecados son a veces consumidos con arroz por algunas poblaciones locales; mientras que las hojas y la corteza son usadas en la medicina tradicional, en particular para la disentería.

Sinonimi: Ficus cordifolia Blume (1825); Ficus subracemosa Blume (1825); Ficus racemifera Roxb. (1832); Ficus amboinensis Kostel. (1833); Ficus laevigata Blanco (1837); Covellia racemifera (Roxb.) Miq. (1848); Ficus cerifera Blume (1855); Ficus ceriflua Jungh. (1853); Ficus subopaca Miq. (1859); Ficus chlorocarpa Benth. (1861); Ficus domestica Zipp. ex Miq (1867); Ficus gummiflua Miq. (1867); Ficus sycomoroides Miq. (1867); Ficus ehretioides F.Muell. ex Benth. (1873); Ficus integrifolia Elmer (1906); Ficus latsonii Elmer (1906); Ficus paucinervia Merr. (1906); Ficus garciae Elmer (1908); Ficus konishii Hayata (1911); Ficus glochidiifolia Hayata (1919); Ficus tenimbrensis S.Moore (1925); Ficus sum Gagnep. (1927); Ficus viridicarpa Corner (1933); Ficus compressitora Elmer (1937); Ficus ilangoides Elmer (1937); Ficus agusanensis Elmer (1939).

 

→ Para apreciar la biodiversidad dentro de la familia de las MORACEAE y encontrar otras especies, clicar aquí.