Familia : Cheloniidae
Texto © Andrea Tarallo
Traducción en español de Carlos Jiménez
Chelonia mydas está presente en áreas tropicales y subtropicales de todos los océanos. En el Mediterráneo se encuentra sólo en las aguas cálidas de la cuenca oriental © Rafi Amar
La Tortuga Verde, o Tortuga, (Chelonia mydas Linné, 1758) es una tortuga marina, por lo que pertenece a la clase Reptilia, al orden de los Testudines ya la familia de los Cheloniidae.
El nombre del género Chelonia proviene del griego Χελώνη (Khelônê), nombre con el que los antiguos griegos identificaban correctamente a las tortugas. Según la leyenda, Khelônê era una ninfa que fue transformada en tortuga por Zeus, para que siempre cargara su casa sobre sus hombros como condena a su pereza. El epíteto específico mydas también proviene del griego y significa «húmedo», en referencia a su hábitat acuático.
Zoogeografía
Con cerca de 1 m de largo, se distingue de Caretta caretta por su caparazón, que tiene 4 placas costales en lugar de 5 y 1 placa caudal en lugar de 2 © Barry Fackler
Chelonia mydas está presente en todos los océanos de la zona tropical y, con menor difusión, en la zona subtropical. También está presente en el Mediterráneo, aunque casi exclusivamente en la cuenca oriental, más cálida.
Aunque sus movimientos migratorios no son bien conocidos, esta especie es ciertamente capaz de recorrer distancias muy largas. Desafortunadamente, su población tiende a disminuir continuamente.
Ecología y hábitat
Como muchas tortugas marinas, la tortuga verde es una especie muy extendida que se puede encontrar en muchos hábitats diferentes durante su ciclo de vida. Sus hábitos varían de una población a otra. Sus sitios de anidación se distribuyen en ochenta países y se cree que habita en las aguas costeras de al menos 140 naciones.
Las escamas no están entrelazadas, es decir, no se superponen. La cabeza tiene dos prefrontales y ninguna placa preocular © Michael Eisenbart
Es una tortuga herbívora, única entre las tortugas marinas, y su dieta se compone principalmente de fanerógamas marinas, por lo que es fácil encontrarla cerca de praderas sumergidas, en aguas poco profundas.
Las áreas de reproducción más grandes son la costa caribeña de Costa Rica, donde en promedio se congregan unas 22.000 hembras para reproducirse, y la Gran Barrera de Coral de Australia, donde la población reproductora se estima en 18.000 individuos.
Por lo general, Chelonia mydas, durante su fase adulta, realiza dos grandes movimientos migratorios. Uno de ellos le permite llegar a la porción de mar adyacente a la playa donde desovará, lo que lleva el nombre de “hábitat de internidación”. Las tortugas verdes solo ocupan este hábitat durante la temporada de apareamiento. Su otra migración consiste en regresar, una vez realizada la puesta, a las áreas de alimentación, es decir, donde se alimentan durante el período entre dos puestas, que varía según las poblaciones pero que generalmente dura de dos a cuatro años.
Durante el día estos animales suelen preferir nadar cerca de la superficie y respirar con frecuencia, mientras que por la noche prefieren largas inmersiones © Ettore Balocchi
La extensión del hábitat de internidación varía según su complejidad: generalmente, los arrecifes de coral, que representan la mayor complejidad, corresponden a pequeñas distancias entre la hembra y la playa a la que luego irá a desovar, mientras que para hábitats menos estructurados, los individuos a veces pueden ocupar áreas que están separadas por varias decenas de kilómetros.
Morfo-fisiología
Chelonia mydas se diferencia de Caretta caretta en que su escudo dorsal tiene 4 placas costales en lugar de 5 y una placa caudal en lugar de dos. En esta especie, el caparazón tiene una protuberancia pronunciada. Las escamas no están entrelazadas, es decir, no se superponen. Por lo general, hay cuatro pares de escamas costales y en la cabeza hay un par de escamas prefrontales, pero no una escama preocular. Su tamaño máximo es de aproximadamente un metro de largo y un peso de más de 130 kg.
La única tortuga marina herbívora, se alimenta principalmente de fanerógamas que crecen en aguas poco profundas © Michael Eisenbart
Por estas dimensiones, Chelonia mydas es la tortuga marina más grande de la familia Cheloniidae. La dieta herbívora contribuye al color de la grasa corporal del animal, lo que explica su nombre común Tortuga Verde.
Etología
Chelonia mydas es una especie amenazada por la contaminación del mar y la pesca. Es por esto que no es raro encontrar tortugas heridas por las hélices de las embarcaciones, con traumatismos por ingerir anzuelos o atrapadas en las redes de los pescadores.
La Tortuga Verde tiene diferentes comportamientos dependiendo de la temporada y el período del ciclo de vida observado.
Esta alimentación herbívora a base de cogollos contribuye al color de la grasa de este animal y de ahí el nombre vulgar de tortuga verde © Jean-Marie Gradot
Si durante sus fases juveniles sólo se alimenta y es transportado pasivamente por las corrientes, su vida adulta se puede dividir en cuatro partes principales: la fase de alimentación, la fase de reproducción y las dos fases migratorias durante las cuales el animal se desplaza entre los luhares de alimentación y de reproducción.
La fase de alimentación es cuando los animales se alimentan casi continuamente, principalmente de brotes de fanerógamas marinas. La preferencia por las hojas más jóvenes probablemente se deba al hecho de que son más ricas en proteínas y menos en fibra, y que representan una fuente de alimento más digerible y rica en energía.
Después de unos años, los animales se trasladan a áreas donde se reproducirán. Entonces prácticamente dejarán de alimentarse.
Se han observado comportamientos de cortejo. Las hembras suelen llamar la atención de varios machos © Rafi Amar
Se han observado algunos comportamientos de cortejo y, por lo general, una hembra recibe la atención de varios machos. A pesar de los múltiples apareamientos con diferentes machos, la promiscuidad del apareamiento no da como resultado una diversidad en la fecundación, teniendo cada nidada un solo padre.
En los dos movimientos migratorios, las Tortugas Verdes presentan diferentes modalidades de nado, ya sean inmersiones prolongadas (la duración máxima registrada en libertad es de 215 minutos; la más profunda, 135 metros) o periodos de inmersiones cortas a pocos metros de profundidad, donde los animales probablemente encuentren las mejores condiciones para nadar eficientemente, sin gastar demasiada energía. Normalmente durante el día los animales prefieren nadar cerca de la superficie y respirar con frecuencia, mientras que por la noche prefieren largas inmersiones. La velocidad media se estimó entre 1,5 y 2 kilómetros por hora.
Sin embargo, el apareamiento promiscuo no da como resultado una fertilización mixta. Cada nido tiene un solo padre © Rafi Amar
Biología reproductiva
Como muchas tortugas marinas, Chelonia mydas es una especie que cubre grandes distancias y que, durante su ciclo de vida, utiliza una amplia gama de hábitats en diversos lugares.
Las crías abandonan la playa nada más nacer y se ha planteado la hipótesis de que tienen una primera fase de vida “oceánica”, como es el caso de Caretta caretta. Durante esta fase, los animales son llevados pasivamente por las corrientes oceánicas y no tienen otra actividad que su crecimiento hasta que, después de varios años, son capaces de vencer las corrientes y nadar para llegar nuevamente a las aguas neríticas.
Cada 2-4 años las hembras regresan a su playa natal para poner en agujeros unos 140 huevos. La incubación dura 2 meses. Los pequeños llegan rápidamente al mar © Bernard Dupont
En esta etapa de su ciclo, las tortugas jóvenes tienen un CCL de alrededor de 50 cm. CCL es una medida típica para rastrear tortugas marinas y para detectar la edad del animal. Consiste en medir la longitud del caparazón desde la cabeza hasta la cola, incluyendo toda la extensión de su curva dorsal.
Una vez que han regresado a la costa, los ejemplares de Tortuga Verde comienzan a alimentarse de algas y fanerógamas marinas, alcanzando la madurez sexual en estas zonas, a una edad estimada entre los 25 y los 40 años.
Cuando el adulto alcanza la madurez, va en busca de su zona de reproducción. Las hembras, según la población, regresan a la playa donde nacen cada dos a cuatro años para poner unos 140 huevos en agujeros cuya profundidad varía entre 30 y 50 cm. Después de unos dos meses de incubación, nacen crías de 50 mm de largo y unos 25 gramos.
Los jóvenes, arrastrados por las corrientes, sólo piensan en comer, hasta que después de varios años logran superarlas y llegar a las aguas neríticas © Giuseppe Mazza
La proporción macho/hembra depende de la temperatura. Las temperaturas por debajo de los 26°C producen solo machos, mientras que por encima de los 30°C la proporción se desequilibra a favor de las hembras.
En general, el pico de nacimientos se da entre finales de primavera y principios de verano. Las crías que salen de los nidos llegan al agua arrastrándose por la arena con la fuerza de las patas que mueven alternativamente. Curiosamente, el modo de movimiento en tierra firme cambia en el adulto, que mueve sus dos patas delanteras al unísono, dejando tras de sí un surco característico, señal de su paso.
Al final de la temporada de apareamiento, los adultos regresan a sus lugares de alimentación, mientras que las crías se dejan llevar por las corrientes.
Ésta descansa sobre una esponja gigante. Chelonia mydas alcanza la madurez sexual a los 25-40 años. Tristemente, esta especie figura como «en peligro» en la Lista Roja © Michael Eisenbart
Sinónimos
Testudo mydas Linneo, 1758; Testudo macropus Walbaum, 1782; Testudo marina vulgaris Lacépède, 1788; Testudo cepediana Daudin, 1802; Chelonia mydas Schweigger, 1812; Caretta cepedii Merrem, 1820; Chelonia lachrymata Cuvier, 1829; Testudo mydas Cuvier, 1831; Chelonia midas Duméril & Ibron, 1835; Euchelus macropus Girard, 1858; Chelonia albiventer Nardo, 1864; Thalassiochelys albiventer Gunter, 1865; Chelonia midas Bocage, 1866; Mydas viridis Gray, 1870; Chelone mydas Boulenger, 1889; Natator tesellatus McUlloch, 1908; Chelonia mydas carrinegra Caldwell, 1962; Chelonia mydas Stebbins, 1985; Chelonia mydas Engelmann et al., 1993; Chelonia mydas Conant & Collins, 1991; Chelonia mydas Glaw & Vences, 1994; Chelonia mydas Cogger, 2000.
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