Famiglia : Antennariidae
Texto © Giuseppe Mazza
Traducción en español por el Prof. José Campos
Conocido como Pez rana o pejesapo de largo cebo, Antennarius multiocellatus (Valenciennes, 1837) pertenece a la clase Actinopterygii, los peces con aletas radiadas, y al orden de los Lophiiformes.
Son animales que ya estaban presentes a principios del Terciario, reunidos hoy en 18 familias: Antennariidae (ver Antennarius commerson, Antennarius pictus y Antennarius striatus), Brachionichthyidae, Caulophrynidae, Centrophrynidae, Ceratiidae, Chaunacidae, Diceratiidae, Gigantactinidae, Himantolophidae, Linophrynidae , Lophichthyidae, Lophiidae (ver Lophius piscatorius), Melanocetidae, Neoceratiidae, Ogcocephalidae (ver Ogcocephalus radiatus), Oneirodidae, Tetrabrachiidae y Thaumatichthyidae.
Se trata de especies bentónicas en las que el primer radio espinoso de la aleta dorsal, situado en la cabeza, se ha transformado en una caña de pescar móvil, provista de un cebo luminiscente en las profundidades, que emplea para atraer hacia su enorme boca a los peces que pasan en busca de alimento.
Viven en todos los océanos, desde aproximadamente 20 m hasta más de 1000 m de profundidad, y presentan unas dimensiones que van desde los 3 cm hasta los 2 m del famoso rape (Lophius piscatorius), que por su tamaño y notoriedad dio nombre al orden.
El nombre genérico Antennarius proviene del latín «antena», que significa asta, antena, en referencia al sedal, mientras que el término específico multiocellatus evoca, también en latín, las numerosas manchas oculares de su librea.
Zoogeografía
Antennarius multiocellatus tiene una amplia distribución en el Atlántico occidental, desde las Bermudas hasta Brasil, pero también se encuentra en la Isla Ascensión, en medio del océano, a medio camino entre América y África.
Ecología-Hábitat
Es una especie asociada a los arrecifes de coral, que se encuentra hasta 66 m de profundidad pero que generalmente vive en aguas menos profundas, camuflada entre las esponjas.
Imita perfectamente su color y apariencia con su piel y ocelos similares a los ósculos, orificios que utilizan las esponjas para oxigenarse. También puede hincharse con agua o aplastarse para adoptar, en lo posible, la misma forma.
Morfofisiología
Antennarius multiocellatus posee un cuerpo macizo y rechoncho. Cuando está quieto es muy difícil de ver y discernir dónde están sus pequeños ojos o su gran boca entrecerrada. Las aletas pectorales y pélvicas se han transformado en patas, y la piel, elástica y arrugada como la de un sapo, carece de escamas y presenta protuberancias parecidas a verrugas.
Además de ocelos, que en todos los peces aparecen siempre en el mismo sitio y constituyen un elemento importante para determinar la especie, su cuerpo presenta un color extremadamente variable.
Puede ser gris, blanco, negro, amarillo, morado, verde, marrón o rojo fuego, como en el llamativo ejemplar que se muestra arriba.
Característico y siempre presente es el gran ocelo situado hacia la cola, debajo de la serie de ocelos más pequeños de la aleta dorsal. Hay otro de tamaño similar en la aleta anal. También aparecen ocelos, más pequeños, en otras partes del cuerpo.
Antennarius multiocellatus se mimetiza con el entorno mejor que un camaleón. Sin embargo, a diferencia de otros peces, este cambio meticuloso no es instantáneo y puede llevar semanas. Además, lento y perezoso como es, los cambios rápidos de color no le sirven de nada, porque una vez que ha encontrado un lugar adecuado, es capaz de permanecer allí hasta un mes.
Sólo se mueve cuando ve que los peces no pican el anzuelo, como haría cualquiera pescador humano que pesque con caña.
Antennarius multiocellatus, conocido precisamente como pez rana «de largo cebo», se distingue también de sus congéneres por la longitud de su sedal, llamado illicium. Esta estructura posee en su extremo un apéndice que puede confundirse con un pequeño gusano, un pequeño crustáceo o un pez pequeño y atrae la atención de sus presas.
En cuanto ve acercarse una presa, agita el cebo hacia arriba y hacia abajo, y cuando está a su alcance, abre su gigantesca boca protráctil y la aspira a una velocidad de 6 milésimas de segundo.
Si ésta no ha acabado ya en el estómago, donde hay suficiente espacio dada la elasticidad de la piel para un pez de su tamaño, la presa es aferrada con finos dientes viliformes, agrupados en bandas como los pelos de un cepillo, y enrollada para ser tragada cuando es larga, como si nada hubiera pasado.
La aleta dorsal, prácticamente dividida en cuatro segmentos o secciones, presenta 3 radios espinosos y 11-12 radios blandos.
La primera sección es la del illicium, que nace de una espina modificada, casi el doble de larga que la espina escondida en la segunda protuberancia carnosa. La tercera sección, más maciza, tiene también una espina oculta; la cuarta, de aspecto normal y menos adiposo, sólo posee radios inermes, como en las aletas anal y caudal.
Las aletas pectorales y pélvicas, transformadas en extremidades, le sirven para moverse, trepar y anclarse a las madréporas, mientras que la caudal la utiliza sólo para saltos cortos o para escapar.
Etología-Biología Reproductiva
Antennarius multiocellatus se alimenta principalmente de peces, pero también de cangrejos y galeras.
Durante la reproducción, el macho, más pequeño que la hembra cargada de huevos, debe tener cuidado de no ser confundido con una presa. Generalmente, la sigue con precaución y, cuando esta se eleva en la columna de agua para desovar, el macho la ayuda en la maniobra empujándola en el vientre.
Antes de dejarse caer al fondo, la compañera expulsa, casi explosivamente, una nube de huevos microscópicos encapsulados en una funda de mucosidad gelatinosa, que el macho fertiliza sobre la marcha.
Las corrientes actúan como un rodillo y la nube se transforma visiblemente en una alfombra, llamada «balsa de huevos», que se aleja dando vueltas elegantemente hacia otros lugares. La eclosión se produce al cabo de unos días y las larvas planctónicas deambulan durante un largo periodo arrastradas por las corrientes, que dispersan la especie.
Antennarius multiocellatus muestra una excelente resiliencia, con una posible duplicación de sus poblaciones en menos de 15 meses. El bajísimo índice de vulnerabilidad a la pesca tiene una puntuación de sólo 10 en una escala de 100, por lo que aparece en la Lista Roja de especies amenazadas de la UICN como “Least Concern” (preocupación menor).
Sinónimos
Chironectes multiocellatus Valenciennes, 1837; Chironectes principis Valenciennes, 1837; Chironectes pavoninus Valenciennes, 1837; Antennarius annulatus Gill, 1863; Antennarius corallinus Poey, 1865; Antennarius stellifer Barbour, 1905; Antennarius verrucosus Bean, 1906; Antennarius astroscopus Nichols, 1912.