Corytoplectus cutucuensis

Familia : Gesneriaceae

Texto © Pietro Puccio

 

Traducción en español de Ignacio Barrionuevo

 

La especie es originaria de Ecuador, donde vive en los bosques nebulosos de las cordilleras de Cutucú y Cóndor, entre los 1000 y los 2000 m de altitud.

El nombre del género deriva probablemente del griego “κωρυτος” (corytos) = bolsa de piel y “πλεκτος” (plectos) = plegado, en referencia a los lóbulos del cáliz; mientras que el epíteto específico hace referencia al lugar de origen del ejemplar tipo, la cordillera de Cutucú, en Ecuador.

El Corytoplectus cutucuensis Wiehler (1995) es una especie herbácea terrestre siempreverde, que puede llegar a medir en torno a los 60 cm de altura, con tallos carnosos y hojas, sobre un peciolo pubescente de color rojo púrpura, simples, opuestas, decusadas, ovadas con ápice agudo y margen crenado, de color verde oscuro y aterciopeladas al tacto con nerviación blanco-verdosa en el haz, enteramente de color púrpura en el envés, de en torno a 10 cm de longitud. Las inflorescencias son terminales, erectas y en forma de umbela, compactas, con numerosas flores con lóbulos del cáliz libres, de alrededor de 1,2 cm de longitud, acrescentes cuando fructifica y persistentes durante largo tiempo, de color rojo vivo, pubescentes; y corola tubular de alrededor de 2 cm de longitud con 5 pétalos de color naranja rojizo, pubescentes, de breve duración. Los frutos son bayas globosas, en torno a 1 cm de diámetro, de color negro azulado con reflejos metálicos y numerosas semillas negras minúsculas en su interior.

Se reproduce por esqueje y fácilmente por semilla, colocada superficialmente en un lugar luminoso, pero no con sol directo, utilizando un sustrato orgánico con adición de arena silícea o agriperlita en un 30 % del total, mantenido constantemente húmedo, aunque sin encharcamientos. El tiempo de germinación es breve, en torno a 2 semanas, con la primera floración a partir de 8 o 9 meses si es mantenida en las mejores condiciones de cultivo.

Rara tanto en la naturaleza como en cultivo, pero de gran efecto ornamental, ya sea por las hojas que por el cáliz persistente y los frutos perlados. Además de para emplearlo en espacios abiertos sombreados en las regiones tropicales y subtropicales húmedas, es una óptima elección para la decoración de interiores. Necesita un ambiente ligeramente sombreado, temperaturas medio-altas con mínimas nocturnas invernales no inferiores a 16 ºC, y humedad superior al 60 %. En caso de humedad insuficiente, además de efectuar nebulizaciones con agua no calcárea a temperatura ambiente, se puede colocar el tiesto sobre un ancho plato relleno de arcilla expandida o grava con un estrato de agua, no en contacto directo con el fondo del tiesto, de modo que se cree un microambiente húmedo en torno a la planta. Requiere un sustrato muy poroso y drenante que puede estar constituido por turba basta con un 30 % de arena silícea o agriperlita. Por su crecimiento bastante lento se adapta también al cultivo en terrario.

Por la destrucción de su hábitat, la especie ha sido incluida en la Lista Roja de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) entre las especies en altísimo riesgo de extinción en un futuro próximo (“En Peligro”).

 

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