Familia : Aegithalidae
Texto © Dr. Gianfranco Colombo
Traducción en español por la Dra Cristina Valcuende
Frecuentes en la zona templada de Eurasia, todos los Mitos (Aegithalos caudatus) trabajan duro para construir el nido de febrero a marzo © Gianfranco Colombo
A veces no es fácil dar una explicación lógica de por qué la naturaleza ha dotado a un animal de un detalle morfológico que en ocasiones parece dificultar el buen desarrollo de su vida diaria. Es evidente que los colores de su plumaje tienen su propio significado cuando los usa el macho, así como las afiladas garras revelan la satisfacción de una necesidad depredadora.
Cuando casi han terminado el nido lo adornan con suaves plumas © Gianfranco Colombo
Sabemos que la naturaleza dota de picos particulares segun la alimentación y alas fuertes y con la forma apropiada caracterizan una adaptación a la migración.
Pero ¿por qué una cola tan desproporcionada en el Mito ? ¿Belleza, elegancia, necesidad?
¡No! Tanto el macho como la hembra los llevan a partes iguales, dejando inmediatamente claro que no forma parte del kit de cortejo del macho.
Como veremos, la cola de esta ave es desproporcionada para su tamaño, la que parece difícil de arrastrar incluso durante el vuelo y seguramente un impedimento durante su continuo corretear entre los arbustos, enredaderas y zarzas en los que pasa la mayor parte de su tiempo.
Entonces, ¿por qué equipar también a la hembra con este apéndice y luego obligarla a incubar en un nido estrecho y pequeño con forma de huevo, absolutamente inadecuado para albergar pájaros con colas tan fuertes?
Es curioso señalar que la forma más sencilla de entender si una hembra de Mito ya está empollando es observar su cola la cual aparece torcida, arrugada con curvaturas antinaturales, precisamente porque dentro de la cámara de empolladura no hay suficiente espacio para mantenerla estirada.
El Mito (Aegithalos caudatus Linnaeus, 1758) es uno de los representantes más pequeños del orden Passeriformes y pertenece a la familia Aegithalidae, un nuevo grupo incluido en la familia Paridae, los Herrerillos comunes, con los que tiene notables conexiones conductuales y morfológicas.
Hay quienes empiezan la construcción amontonando telarañas en el pico © Gianfranco Colombo
El nombre científico fue tomado del término griego dado por Aristóteles «aigithalos», sin hacer una distinción clara mientras que «caudatus» proviene del latín con el sentido de cola, precisamente por el largo apéndice.
En Europa tiene diferentes nombres : en inglés Long-tailed Tit, en alemán Schwanzmeise, en portugués Chapim-rabilongo , en francés Mésange à longue queue y en italiano Codibugnolo.
Zoogeografia
El Mito común tiene una amplia distribución que se extiende desde las costas atlánticas de Europa hasta las costas del Pacífico en todo el continente asiático. Sólo falta en las zonas frías del extremo norte de los dos continentes, donde las condiciones climáticas invernales no permiten la supervivencia de esta diminuta ave.
Al sur, en la cordillera , se detiene en algunas islas del Mediterráneo mientras que en Asia alcanza los territorios áridos y esteparios del sector sur, evitando por completo el subcontinente indio y el sudeste asiático.
No los encontramos en Cerdeña y en algunas islas más pequeñas del Mediterráneo pero ocupa totalmente la península Ibérica, los Balcanes y Oriente Medio.
Ecología-Hábitat
El Mito habita principalmente en zonas boscosas, tanto de montaña como de llanura, con densos arbustos, zarzas y setos con plantas trepadoras, pero prefiere zonas limítrofes con espacios abiertos y soleados.
En las llanuras le encanta frecuentar los pequeños matorrales ribereños a lo largo de los ríos o incluso las acequias que cruzan grandes zonas agrícolas. Es un ave prácticamente sedentaria en la mayor parte de sus áreas de distribución, demostrando un apego genético a su lugar de origen de modo que siempre pasa toda su vida en los mismos lugares.
Enorme trabajo para unos pajaritos de 7-9 g y 6 cm, cola aparte, que en sólo 15-20 días,pieza a pieza que tienen que soldar entre sí, utilizando telarañas pegajosas , cola, como en esta foto, y crisálidas de insectos Arquea álamos, musgos y líquenes para crear una estructura flexible y suave, bien anclada al soporte © Gianfranco Colombo
Para las poblaciones del extremo norte asistimos a notables movimientos latitudinales debido a la dificultad de esta ave para superar las duras temperaturas durante largos períodos. De hecho, incluso en zonas donde reside tradicionalmente, pueden producirse verdaderas diezmas durante el invierno, cuando de repente se produce un frío intenso durante largos períodos.
Aquí vemos el típico nido entre las zarzas: tiene forma de huevo, de unos 20 cm de alto y 12 cm de ancho, con un agujerito colocado lateralmente en la parte superior © Gianfranco Colombo
Durante el período invernal se puede encontrar en cualquier ambiente, incluso urbano, cuando, junto con sus pares y sus primos los Herrerillos, forma grandes bandadas que revolotean de rama en rama en busca de los pocos insectos que sobreviven durante el invierno.
Un pajarito siempre en movimiento, incansable y vivaz y siempre ruidoso con su insistente srrr srrr, un trino casi ultrasónico que emite continuamente para mantener el contacto grupal.
Los polluelos piden comida. Se ponen de 8 a 12 huevos, uno por día, y la hembra incuba durante unas dos semanas © Gianfranco Colombo
Morfofisiologia
El Mito común tiene un tamaño muy pequeño, lo que lo convierte en una de las aves de menor tamaño de Europa. Tiene un peso medio de 7 g que a veces puede alcanzar los 9 a finales de otoño; una envergadura de 15/17 cm y una longitud de 14 cm de los cuales 8-9 cm es solo de cola. Tiene un apéndice que ocupa el 65% de su cuerpo. Macho y hembra son indistinguibles e incluso los jóvenes tienen el mismo plumaje de los adultos al final del primer año.
Un padre lleva de regalos. La dieta básica se compone de arañas y pequeños insectos, con sus huevos y crisálidas, las semillas y bayas son para la mala estación © Gianfranco Colombo
El color básico es el blanco con vetas negruzcas que cubren las alas, la cabeza y el dorso. El pecho y el vientre son totalmente blancos mientras que la cola tiene plumas negras siendo las exteriores blancas. En algunas subespecies también hay tonos rosados y grisáceos en el dorso. Tiene un pico muy pequeño, triangular, poco prominente y casi invisible, de color negro al igual que las patas.
Además de sus trinos, los Mitos se comunican con la mirada y los movimientos de las plumas © Gianfranco Colombo
En la parte norte de su habitat se encuentra la subespecie del grupo Aegithalos caudatus caudatus tiene un plumaje particular con la cabeza totalmente blanca como la nieve, mientras que las partes del sur de Europa y parcialmente asiáticas están ocupadas por la cepa Aegithalos caudatus europaeus con un plumaje típico, a menudo es híbrido . Ell Aegithalos caudatus alpinus, en cambio, ocupa la zona mediterránea y gran parte del área de distribución del sur de Asia.
De estas tres cepas se han clasificado una veintena de subespecies, específicas de territorios a veces muy limitados que no son fáciles de identificar en el campo, salvo mediante la manipulación directa de los ejemplares recolectados durante el anidamiento.
Sólo en Europa encontramos : Aegithalos caudatus rosaceus de Gran Bretaña, Aegithalos caudatus aremoricus del oeste de Francia, Aegithalos caudatus taiti y Aegithalos caudatus irbii ambos de la península ibérica, Aegithalos caudatus italiae de la Italia peninsular y parte de Eslovenia, Aegithalos caudatus siculus de Sicilia y Aegithalos caudatus macedonicus de la península de los Balcanes.
Etología-Biología Reproductiva
El Mito es una especie monógama y anida sólo una vez al año. Es una especie bastante precoz y, a menudo, a finales de febrero o principios de marzo, vemos los primeros signos de construcción del nido. Generalmente les encanta construir entre zarzas, arbustos bajos o escondido entre la hiedra y las trepadoras que se enroscan en los troncos de las bayas de saúco, rubinias y lárboles de hoja ancha . No le importa construirlo al aire libre en la bifurcación de el tronco de un árbol, confiando en que el color del material utilizado les camuflará con la corteza.
La altura donde se coloca el nido no es constante, en ocasiones puede estar a unos pocos centímetros del suelo, incluso en la orilla de un curso de agua suspendido sobre la superficie pero no suele superar los tres metros de altura.
En particular, cuando están nerviosos, levantan las plumas de la cabeza © Gianfranco Colombo
La construcción del nido del Mito es una de las operaciones más largas y complicadas para un pájaro, lastrada por el pequeñísimo tamaño del arquitecto y la enorme cantidad de material que debe aportar para completar una obra tan excepcional.
Una vez elegido el lugar donde construir el nido, la pareja comienza por colocar una base formada por musgo atado y pegado trozo a trozo con pegajosas telarañas que mezclan con hojuelas de algodón vegetal, líquenes y crisálidas de pequeños insectos con una cuidadosa y minuciosa maestría.
Pieza a pieza, en unos 15/20 días de trabajo incesante, se construye una estructura en forma de huevo de unos 20 cm de alto y 12 cm de ancho con un pequeño y estrecho agujero colocado lateralmente en la parte superior. La estructura es muy ligera, muy flexible, blanda y bien anclada, de hecho prácticamente pegada al soporte sobre el que se construye.
El interior se reviste con pequeñas plumas de todos los colores, muy suaves y recogidas quién sabe dónde, haciendo del interior un auténtico nicho.
Se ha comprobado que la recogida y el transporte del material para la construcción de la estructura exterior implica varios miles de viajes para la pareja y nada menos que unos cientos para el mobiliario interior. Ponen de 8 a 12 huevos a razón de uno por día y la cría es solo responsabilidad de la hembra, dura aproximadamente dos semanas. Las crías empluman después de unas dos semanas.
Dos semanas después del nacimiento, las crías abandonan el nido y ya son capaces de volar. Pero la vida del Aegithalos caudatus es corta: de media, si todo va bien apenas alcanza los 3 años © Gianfranco Colombo
El nido del Mito está sujeto a una depredación muy fuerte que lleva a la destrucción de aproximadamente el 80% de los nidos. Los cuervos y córvidos, las aves rapaces y los ratones, las culebras y el mal tiempo son a menudo la causa de estos accidentes.
Cuando esto sucede, la pareja generalmente renuncia a un nido de reemplazo y prefiere usar su experiencia y deseo de prolificidad para ayudar a otras parejas que anidan cerca. De hecho, no es raro ver a varios adultos alimentando a sus crías en el mismo nido.
El Mito se alimenta principalmente de insectos y sus huevos, pequeñas crisálidas y arañas tanto durante el verano como en el invierno, aunque durante la mala estación complementa su dieta con semillas, bayas y frutos que quedan accidentalmente en los árboles.
La necesidad de vivir en grupos durante este período alcanza su propósito principal durante la noche, cuando todos los participantes se reúnen apretujados y amontonados sobre un mismo soporte, apoyados en el tronco o en un espeso arbusto para protegerse del frío cortante. Una masa informe de plumas que impide la dispersión del calor corporal.
Tan distante y tan diferente pero tan parecido en comportamiento al Pingüino Emperador (Aptenodytes forsteri) que realiza el mismo truco en la Antártida.
En la parte norte de su hábitat se encuentra la subespecie del grupo Aegithalos caudatus caudatus que tiene el plumaje de la cabeza completamente blanco como la nieve © Sergio Mazzoleri
Tienen una esperanza de vida bastante corta dado que de media apenas superan el tercer año de edad.
Las poblaciones de Aegithalos caudatus son estables, y desde 2016 figura como “LC, Least Concern”, es decir, como «Preocupación Menor», en la Lista Roja de especies en peligro de extinción de la IUCN.
Sinónimos
Parus caudatus Linnaeus, 1758.
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