Famiglia : Mullidae
Texto © Giuseppe Mazza
Traducción en español de Carlos Jiménez
Mulloidichthys martinicus (Cuvier, 1829) pertenece a la clase de los Actinopterygii, los peces con aletas radiadas, al orden de los Mulliformes y a la familia de los Mullidae, la de los salmonetes, que cuenta con 6 géneros y alrededor de un centenar de especies.
A primera vista recuerda al salmonete (Mullus surmuletus), frecuente en el Mediterráneo, el Mar Negro y a lo largo de las costas del Atlántico oriental, desde Inglaterra hasta Mauritania, hasta el punto de que el término Mulloidichthys proviene del griego del género Mulloides, es decir, que tiene la forma de un Mullus, y “ichthys”, un pez. Un giro de frase, por tanto, para decir que es un pez parecido a un salmonete.
El nombre de la especie, martinicus, de Martinica en latín, recuerda su presencia en las costas de esta conocida isla francesa de las Indias Occidentales.
Zoogeografía
En realidad, el área de distribución de Mulloidichthys martinicus se extiende, además del Caribe, a varias localidades tropicales del Atlántico. En América lo encontramos desde las Bahamas, Florida y el Golfo de México hasta el sur de Brasil, y luego en medio del océano hasta el archipiélago de Trinidade y Martim Vaz, hasta las islas de Ascensión y Santa Elena, y no llega lejos de las costas africanas, las Islas Canarias, Cabo Verde y Santo Tomé en el Golfo de Guinea.
Ecología-Hábitat
Mulloidichthys martinicus nada principalmente en aguas poco profundas en los primeros 35 m de agua, pero también hasta los 50 m de profundidad con un máximo de 135 m.
No está presente en regiones sin arrecifes de coral ni en las desembocaduras de ríos.
Morfofisiología
Mulloidichthys martinicus puede alcanzar los 45 cm de longitud, pero el tamaño actual ronda los 28 cm.
El cuerpo es alargado, cilíndrico, casi plano como la cabeza en el lado ventral. La cabeza es relativamente grande, con una frente pronunciada y convexa, y en el opérculo se puede ver una pequeña espina. La boca situada baja, protráctil, con diminutos dientes cónicos y viliformes, tiene una mandíbula corta, que no llega a la parte anterior del ojo.
Las dos barbillas largas y carnosas, debajo del mentón, contienen órganos quimiosensoriales muy sensibles que guían a los peces por la arena y los barrancos en busca de invertebrados bentónicos.
Hay dos aletas dorsales: la primera con 8 radios espinosos y la segunda con 1 radio espinoso y 8 radios blandos. La aleta anal tiene 2 radios espinosos y 6 blandos. Las pectorales tienen 16 radios blandos. La caudal está bifurcada.
La librea, verde oliva claro arriba y blanquecina abajo, cambia según las circunstancias por efecto de los cromatóforos, pero sobre todo presenta una característica franja amarilla, casi siempre acentuada por un borde azul, que va desde el ojo hasta el pedúnculo caudal. .
Esta franja amarilla, única en el mundo de los salmonetes, es un elemento importante para la rápida identificación visual del pez, incluso cuando tiende al rojo en su conjunto. Sin embargo, las aletas siempre permanecen amarillas o amarillentas.
Etología-Biología Reproductiva
Mulloidichthys martinicus se alimenta principalmente de invertebrados bentónicos, generalmente poliquetos, moluscos bivalvos como almejas y pequeños crustáceos, pero también de peces pequeños, a menudo cazados en cardúmenes durante el día.
Es fácil encontrarlo mezclado con agrupaciones de Haemulidae, como Haemulon chrysargyreum, o Lutjanidae, como Ocyurus chrysurus, a los que imita perfectamente en su librea y perfil plegando las barbas de la garganta en el correspondiente surco central. Camuflado en grandes cardúmenes, escapa a la mirada de los depredadores y tiene más probabilidades de sobrevivir en caso de ataques.
Por otro lado, cuando ara solo el fondo del mar con sus barbillas, a menudo se le unen, contra su voluntad, peces como el Caranx ruber que aprovechan su capacidad de encontrar presas para robarle rápidamente el alimento de la boca.
Los machos alcanzan la madurez sexual alrededor de los 18,5 cm y son más grandes y numerosos que las hembras, que por el contrario ya están listas para poner huevos con alrededor de 17,5 cm de longitud.
La reproducción, con huevos pelágicos confiados a las corrientes, se produce dos veces al año, principalmente de marzo a abril y luego de septiembre a octubre. Las crías crecen juntas, moviéndose en densos cardúmenes y esta costumbre se conserva también en las formaciones de adultos que, cuando descansan o cazan en grupo entre los corales, son todos del mismo tamaño.Los jóvenes crecen juntos, formando a menudo inmensos grupos de pares. Un hábito que conservan incluso de adultos cuando se mueven o cazan durante el día © Pauline Walsh Jacobson
En la naturaleza, los principales enemigos de Mulloidichthys martinicus son la Llampuga o Dorado (Coryphaena hippurus), la Bacoreta (Euthynnus alletteratus) y meros como el Epinephelus guttatus.
Gracias a que está en constante movimiento, no se ve amenazado por el invasor Pterois volitans, introducido descuidadamente en el Caribe.
La carne de este salmonete es excelente y se captura a menudo con sedales, trampas y redes de enmalle aunque en ocasiones corre riesgo de producir ciguatera, una grave intoxicación alimentaria teóricamente posible si se han depredado de animales que acumulan en sus tejidos la toxina producida por el dinoflagelado Gambierdiscus toxicus.
Sin embargo, la presión pesquera sigue siendo baja en comparación con otras especies y las poblaciones son estables. La resiliencia es mediocre, con un tiempo mínimo para duplicar la población de 1,4 a 4,4 años, pero la vulnerabilidad a la pesca tiene una puntuación de sólo 35 en una escala de 100.
Por lo tanto, Mulloidichthys martinicus ha sido incluido como «LC, Least Concern», es decir, sin riesgo, en la Lista Roja de especies en peligro de extinción de la UICN desde 2013.
Sinónimos
Upeneus martinicus Cuvier, 1829; Mulloides martinicus (Cuvier, 1829).