Familia : Bromeliaceae
Texto © Pietro Puccio
Traducción en español de Susana Franke
Aechmea pectinata © Giuseppe Mazza
La Aechmea pectinata Baker (1879) es originaria del Brasil sudoriental donde crece ya sea en las selvas húmedas como a los largo de las costas en los manglares y sobre las rocas.
El nombre del género deriva del griego “aichme” = punta de lanza, con referencia a los ápices espinosos de los sépalos y de las brácteas florales.
El nombre de la especie es el término en latín “pectinata” = peinada, pero también dotada de peine, con probable referencia a la forma de la inflorescencia.
Especie herbácea, siempre-verde, monocárpica (fructifica una sola vez y luego muere), acaule, epífita, y en menor medida terrestre y litófita, presenta una roseta imbutiforme de hojas dispuestas formando una cavidad central normalmente llena de agua.
Las hojas de color verde claro con manchas dispersas mas oscuras, largas 40-70 cm y anchas 4-8 cm, son lineares-lanceoladas con ápice espinoso y márgenes dotados de espinas negras recurvas largas 2-3 mm. Las hojas al aproximarse la floración comienzan a colorearse irregularmente de rosa intenso partiendo desde el ápice hasta casi cubrir toda la lámina foliar mientras continúa la floración.
La inflorescencia, en el centro de la roseta, está constituida por un robusto y generalmente erecto escapo floral, largo 35-40 cm, recubierto por brácteas imbricadas de color verde claro, coriáceas, espinosas en los márgenes y en el ápice, que en la base son largas cerca 20 cm para después reducirse progresivamente a 2-4 cm superiormente. El escapo termina con una inflorescencia globosa compacta y vellosa, de 7-12 cm de largo y 5-8 cm de diámetro, con brácteas florales triangulares de color verde claro como los sépalos, lanceolados, de 15 mm de largo. Las flores tubulares, con pétalos oblongos blanco-verduzco de cerca 2 cm de largo, se abren secuencialmente, al ritmo de 10-15 por día, por aproximadamente tres semanas; las flores, autoestériles, son ricas en néctar y atraen a algunas especies de colibríes que colaboran con la fecundación cruzada. Los frutos son bayas largas cerca 18 mm.
Las flores atraen a los colibríes © Giuseppe Mazza
Especie no muy difusa, a pesar de la característica coloración que asume en el período de la floración, con el neto contraste entre el rosa fuerte de los contornos irregulares y el verde pálido del resto de la hoja, es cultivable al aire libre en los países de clima tropical y subtropical húmedo, ya sea como epífita sobre los árboles o sobre las rocas que como terrestre sobre sustratos muy aireados, porosos, drenantes y ricos en sustancia orgánica, preferentemente en posición sombreada, aunque soporta el pleno sol. Se puede intentar la cultivación al aire libre también en los climas templado cálido, soportando, por brevísimo período, temperaturas de hasta -2ºC, en posición reparada de las lluvias invernales dado que la humedad y la baja temperatura la hacen más sensibles a la podredumbre.
Por otra parte también se cultiva en tiestos con las mismas características previstas para la cultivación en el exterior, con temperaturas superiores a 14ºC, ideal 20-22ºC, regando frecuentemente en verano pero dejando secar el sustrato antes de volver a regar, disminuir los riegos en invierno. La humedad ambiental, en presencia de aire seco y elevadas temperaturas, puede ser incrementada con nebulizaciones utilizando agua a temperatura ambiente y no calcárea para evitar antiestéticas manchas sobre las hojas. En verano se puede dejar un poco de agua en la cavidad central formada por la roseta de hojas, renovándola frecuentemente para evitar que se transforme un foco de larvas de mosquitos; mientras que en invierno es preferible dejarla seca para evitas posibles podredumbres.
Sinónimos: Chevaliera crocophylla E.Morren (1885); Aechmea crocophylla (E.Morren) Baker (1889); Pothuava pectinata (Baker) L.B.Sm. & W.J.Kress, (1989); Aechmea armata Lindm. (1891).